Un Sueño, una aparición, una sensación al despertar, una idea, la mirada perdida en algún lugar y la cabeza viajando, un sabor que se acuesta en la punta de la lengua cuando amanecés, te invito a que pasees por estos paisajes oníricos y si te tienta.....compartas lo tuyo.



martes, 24 de enero de 2012

Que lindo !! Este había quedado pendiente de hace un tiempo!! Espero los comentarios....

 Por Rodrigo Chamorro Oschilewsky


Desde hace dos horas me veo en un duermevela. Observo y me veo ansioso. No es de aquellos duermevela que hacia para cuidar a mis hijas de chiquitas. Ahora mi sensación es nueva y vertiginosa. La observo al lado de mi almohada.Tantas veces la soñé a mi lado, y ahora esta aquí. Bella, desnuda y frágil.
Recorro su tez con mano invisible y cada cierto rato pongo mi mano sutilmente bajo su nariz. Respira, no es fantasía, esta allí conmigo.
El cansancio me vence por minutoeterno. Despierto o al menos lo intento. Quiero abrazarla, besarla, recorrerla, hablar.... En fin, tanto de lo esperado, y no me atrevo a romper este momento. Intento no moverme para no despertarla.
Cuantas horas han pasado, no lo se. Morfeo insiste conmigo......ahora sus labios tocan los míos, me abraza, se incorpora, me besa y se levanta. - Gracias por este momento, dice. Se incorpora y desaparece.
Llevo días insomne ahora, esperandola.

Otro Lindo sueñocuento, una joyita literaria de Cami!! Disfruten y comenten, opinen, pregunten, que se abra la red!!!!

Y nunca, dejes de dibujar

Por Cami Cardellino


Estaba yo, parada tras el gran portón de rejas negras en mi casa, con un abanico de papel plegado en mis manitos cual tesoro. Miraba el afuera desde la comodidad de mi hogar, pero con un dejo de nostalgia. Veo caminar una pareja, que comentan al pasar algo así como “qué lindo llegar a viejos, y locos, locos los dos”. Siento una canción de marcha a lo lejos, casi indefinida, imperceptible. La siento cada vez más cerca, y ahora siento también pasos, indicios de que claramente venían personas marchando. Me asomo un poquito más haciendo puntitas de pie, y como queriendo sacar la cabeza por entre los barrotes del portón, veo que en la esquina gira una parejita de ancianos, llenos de gracia, vestidos cual cosacos con gorros de piel imponentes y largos tapados de paño rojo en pleno verano. Se van acercando, y mis ojos intrigados siguen su marcha. Al llegar a mi portón detienen su marcha y un silencio corta la escena.
Voltean su mirada hacia mi y me preguntan en coro “¿Qué estás dibujando?”, yo sin saber bien, desplego mi papel ajetreado y húmedo por la llovizna de verano que nos estaba acechando, y les estiro mi dibujo, uno de mis favoritos titulado “Perfectamente imperfetos”.
Lo contemplan por segundos, me lo devuelven, y ellos sin lápiz, ni papel, ni contestando alguna pregunta (porque de hecho, yo estaba enmudecida), me dicen “Nosotros estamos dibujando nuestras ganas de vivir”. 
Y en mi cabeza como una voz interna que me susurra,
oigo con eco repetidas veces la frase
“Y nunca dejes de dibujar, y nunca dejes de dibujar, y nunca dejes...”


jueves, 19 de enero de 2012

Por Gerardo Quintana
Sueños, sueños, sueños, yo diría que son realidades dentro nuestro, aunque no se concreten ya son, los hicimos, los pensamos, los deseamos, y se concretan con alas de colores brillantes, luces incandescentes en los océanos de nuestros pensamientos, en los movimientos de nuestros cuerpos buscando, hurgando las entrañas, sintiendo que están que es lo que nos permite estar vivos. SUEÑOS, SUEÑOS, SUEÑOS.....

miércoles, 18 de enero de 2012

NOSTALGIA / ANHELO





 Por María Victoria Ferrer




                              Las primeras horas de la mañana suelen tener un sabor mágico, como aquellas masitas de mi abuela, crocantes, suavecitas, con aroma a hogar… Se pueden disfrutar despacito y en silencio… Abrí la puerta vaivén que daba al patio. Crujió con dolor. Hace tiempo que nadie iba a la casa.

                      Estabas sentado en un banquito chiquito, con la pintura verde un poco descascarada. Tenías pantalones cortos, una camisita que alguna vez fue blanca y la cara sucia de tierra…Chupabas un caramelo que sostenías con tu pequeña manito.  Tu flequillo transpirado se pegaba a tu frente y me dijiste que te llamabas Pedro.  Tenías ojos de soledad que miraban fijamente al gato color caramelo que daba vueltas enloquecidas en el tender del patio cubierto de campanitas de colores. El sauce por encima de tu cabeza se mecía al compás de la brisa matutina. De lejos se escuchaba una canción infantil que no lograba distinguir.
Te quise tocar la cabeza y no me dejaste.  Huiste escondiéndola entre las piernas, con miedo.

                             Si hubiera sido la siesta, habría pensado que eras un duende norteño, esos que salen a amedrentar niños en el calor del verano.
Te habría llevado conmigo. Y habría limpiado con cuidado todas tus heridas, las de adentro y las de afuera.  Te habría mostrado las buenas cosas, habríamos subido juntos a la calesita de la plaza de Alberdi, leído cuentos de países lejanos en la noche y habría llenado tu vacía panza con leche y amor, para que nunca más, nunca más, te hubieras sentido solo.

                              Te habría llevado conmigo.  Pero no me dejaste.



lunes, 16 de enero de 2012

Te sueño en sueños

 Por Cami Cardellino
 

                Una mesa larga, desbordando de colores, disfraces, cosas de utilería, y ése libro. Yo, vestida de clown esperaba mi turno para dar la función mientras lo miraba extrañada. Era un libro de enormes dimensiones, sus hojas eran láminas de madera, y los dibujos en su tapa me invitaban a leerlo. Lo abro, me encuentro con un libro mudo y un ser azul cual títere, me miraba. Me miraba tan penetrante que me hacía dudar si era real, y estaba encerrado en un cuento, entre tapa y tapa, esperando que alguien (tal vez yo) tenga el tupé de excarcelarlo. No, definitivamente jamás iba a ser libre: Por algún motivo que me pareció casi irrelevante, la casa tenía todas sus aberturas cerradas, tapadas con maderas y clavos, y muebles apilados, y bloques de cemento. Iba a dar un show sin espectadores, pero de todas maneras, lo iba a dar, ya estaba vestida y podía sentir esa adrenalina previa a la puesta en escena. Sin ver otro cuerpo además del mío, era consciente que no estaba sola. Por un ventiluz que había quedado al descubierto, se asoma una mano, y a la orden imperante de "escondanse todos", atino a hacerme pequeñita y esconderme bajo una mesita de luz. Veo luz, veo un puente como holograma. Me atrevo, corro en su dirección, y salgo al mundo. Corro, corro sin saber dónde estaba pero sabiendo a dónde quería ir. Vos me esperabas en esas coordenadas que rondaban mi cabeza, podía estar segura. Encuentro un colectivo, semejaba ser uno de larga distancia, semicama, de dos pisos. Me acerco a probar suerte, y preguntarle al chofer cómo llegar a vos. Con una sonrisa me dice que tome asiento, le tiro unas monedas y un caramelo que encuentro en mi mameluco amarillo. Me siento pero en un cajón de manzanas en el pasillo del segundo piso, y lo veo subir. Perfectamente desalineado y atractivo. Nos miramos y al parecer desconocernos, sabíamos que de algún lado nos conocíamos. Se me sienta al lado, en un poquito de cajón que le convido, y mira al techo. Alzo mi mirada, veo una frase escrita en el techo, la leo en voz alta, y él la completa en voz bajita, respirandome en el cuello, me vuelve la mirada y mi mundo se apaga cual televisor. Siento codazos, y oigo casi sin escuchar la voz de mi amigo que me repite insistente "Dale, te toca a vos". Entredormida abro los ojos, me encuentro en un colectivo, pero desconozco el momento que mi asiento pasó a ser semicama, y mi compañero se esfumó. Pongo mis ojos en el techo, y veo dibujada la misma oración, que ésta vez me la leía en voz alta Santi, mi amigo, y me tocaba a mi completarla con lo que aquel jovencito que compartíamos un cajón de manzanas, me había susurrado al oído.

viernes, 13 de enero de 2012

Vorágine



Empieza caminando y acelera el paso a medida que busca, recorre y no encuentra. Anda atrás de esa palabra, un nombre, la canción, ese rostro que se perdió en el desierto mental o desapareció por el circuito no tan cerrado y se escondió para quitarle peso a la cabeza. No existe analogía en la realidad de la dificultad de arremeter en las entrañas del cerebro para encontrar, en los laberintos cefáleos, un coso perdido.
Aumenta la velocidad, todo corre, confuso, rápido, vertiginoso y, ahí, envuelve el cuerpo, el éter, el cosmos completamente. Se dispersa por el cerebro, martiriza, cansa, asusta, atormenta. La señal se multiplica y se transforma en muñequitos que, con pies y manos, batallan y se aglomeran mientras invaden los terrenos. Túneles, puentes, ríos debarrancados… Se cortó la luz. La única claridad viene de unos destellos a lo lejos. Los relámpagos se observan a través de las ventanillas del tren. Los soldaditos atacan todo. Agitados, transpirados y desaparecen.
Amanece. Manto lumínico y la señal se va. Esta noche, aunque sea por dos minutos, vendrá de nuevo.

Por Bee Girl


jueves, 12 de enero de 2012

Mi boca esta salada, mojada, estoy sin aliento, mis brazos cansados me sostienen flotando, estoy en el agua ,un rio o posiblemente el mar , estoy perdiendo el conocimiento, con cada bocanada de aire entra la aspereza del agua , me estoy hundiendo, las olas son cada vez más fuertes los gritos de los demás son ensordecedores, me voy muy lentamente hacia abajo y todo parece más quieto, las expresiones desesperantes ya no llegan a mis oídos, tengo un manojo de preguntas que quedan dando vueltas en mi cabeza y poco a poco voy sintiendo que me duermo, me hundo , me estoy yendo, me estaré muriendo?

De golpe algo tira de mi pie, me arrastra hasta la superficie, las aguas injustas me llevan hacia adentro, pero la fuerza del tirón es más, es un contacto conocido , familiar y cuando mi cara se descubre de agua y mis ojos que arden hasta las pupilas se animan a ver la superficie, la veo a ella como siempre, sacándome del pozo, resolviendo las eternas dudas, no puedo creerlo mis pies tocan el suelo , nos abrazamos, yo la abrazo agradeciendo , el lugar me es desconocido y no tanto a la vez, antes había calles transitadas por mi y ahora todo estaba cubierto de agua y de cuerpos, algo pasó, algo difícil y terrible, ella no puede explicármelo o no lo necesita, pero algo pasó, algo no es igual, estamos solas.

Miro el cielo y veo objetos extraños arriba , siento miedo o siento paz, no puedo saberlo los sentimientos están siendo muy distintos, es muy raro, me pregunto si esto es “ el fin del mundo” me pregunto por qué no estoy muerta , las luces del cielo iluminan como si fuera de dia, pero es de noche , las luces del cielo… pueden ser naves, son naves, de golpe dejo de verlas, ella me llama para que entremos a una casa, tampoco entiendo porque estamos tan tranquilas.

En la casa hay gente sentada en el piso, como en un círculo , son alrededor de diez, algunas caras me suenan de antes, hablamos un rato de cómo estamos, de cómo nos sentimos, es muy raro todo, no puedo entender lo que está pasando, dicen que los demás están muertos, que en el planeta ya no queda nadie, solo estamos nosotros, a último momento llega un hombre, muy extraño, algo pelado, ya lo había visto quizás en mis sueños, o de otros lugares; ella le dice: - pasá no empezamos todavía, vi como te salías de tu cuerpo y sabia que ibas a llegar solo hasta aquí. Ellos se conocían, de siempre, de antes.

Más preguntas, parecía que todos sabían lo que ocurría menos yo -¿estamos muertos? pregunté y en ese instante sin que nadie me dijera nada algo sin palabras me iluminó de un explosión de entendimiento que es inexplicable con palabras algo que jamás sentí , en un segundo me paso la vida , todos mis recorridos, mis sueños recurrentes, mi historia, la gente , las casualidades, los encuentros y a pesar de saberme muerta, entendí que hacíamos ahí en esa casa , en este instante, sentados en el piso.

Hay que refundar el planeta y nosotros somos las almas que vamos a volver, pero tenemos que ponernos de acuerdo antes de nacer en el plano físico, para saber cómo vamos a organizar el planeta, una chica dijo algo acerca de acabar con el intercambio de dinero, yo me empecé a desesperar, me preguntaba y les pregunté a todos llorando, gritando con mil nudos en el “cuerpo” cómo hacemos para volver a construir, por dónde empezamos y si de nuevo nos olvidamos de los demás y si volvemos a creer que lo importante es estar bien en nuestra individualidad? Y si volvemos a hacer de la vida un intercambio de papeles, de cosas? Y si volvemos a vivir con personajes inventados? Y si volvemos a mentir, a engañar? Y si de nuevo creemos que lo mejor es estar separados? Que el amor se trata de balcones y de casamientos? Que familia es tener hijos buenos? Que crecer es formalizarse? Que el cariño es meloso y que la frialdad es fortaleza? Y si de nuevo miramos para otro lado cuando alguien está mal? Y si de nuevo nos ponemos violentos? ¿Cómo garantizamos, cómo nos aseguramos a que todo no se va a podrir de nuevo eh?!!!?...
El hombre extraño me miró con ojos cómplices y mientras me respondía en su cara se iba esbozando una sonrisa - con la música, no te olvides de la música.

Un sueño de Luz